Papá canguro Kira y los gemelos

Kira el canguro y sus bébés, un proyecto al ganchillo según el modelo de la creadora Lydia Tresselt de Lalylala.

Con las merecidas pausas veraniegas en el borde de la piscina y un único ganchillo regalo de Lola, que me enseñó a sujetarlo y a hacer una cadena base, me puse a buscar algunos modelos para aprender algo nuevo y fue así como acabé dando con las preciosidades de Lalylala. Un amor a primera vista ♡

Durante los siguientes cuatro meses pude practicar algunos amigurumis de pequeño tamaño hasta que leí el hilo de actualidad de mi amiga instagramera Ratcheat @quelquechosedslr, creadora-costurera de bonitas realizaciones floridas y coloridas donde conocí el #CALmignonneries lanzado por Soazig @unefilleafrange a partir del 12 septiembre 2016.

Según lo explica en su blog, CAL es un Crochet Along, es decir, tejer al ganchillo juntos; era la primera vez que oía hablar de ello y me pareció una bonita iniciativa para motivarnos y ayudarnos mientras compartimos nuestros Lalylalas en curso, y una ocasión inmejorable para empezar mi primer gran dudú.

El proyecto en curso

Así, me dispuse a probar el crochet con una lana suave, la Alpaca Blend Chunky del fabricante alemán Rico Design, en tonos aqua y gris.
Al igual que con los pequeños amigurumis con los que empecé a crochetear, es una maravilla comprobar como un muñeco nace de estos ovillos que poco a poco disminuyen para terminar cogiendo vida una vez que se ensamblan todas sus partes y se le confiere personalidad colocándole los ojos!

¿Qué color escoger?

Las lanas de Wool and the Gang son tan suaves y los colores tan variados que el dilema para escogerlas se resolvió gracias a la ayuda de las amigas intagrameras, y solo entonces papá canguro se decidió por este luminoso amarillo mostaza a juego con los colores de los crepúsculos invernales del momento.
Kira queda ahora a la espera de un accesorio antes de irse de paseo con los gemelos, pero chsss… es una sorpresa.

Vamos, listos para el paseo!

Al final Papá Kira es un gran bébé de 48 cm de alto contando las orejitas y pesa 440 grs sin su bufanda, ups!
El accesorio-sorpresa son sus botas ya que sus pies me parecían un poco pequeños; sí, sí, culpa mía seguro.

Lo cierto es que al igual que ocurre al tejer con agujas y otras actividades creativas donde las dos manos se activan febrilmente, el crochet es un verdadero momento de relax… si obviamos lo de contar cada malla si parar ;)
Kira llevó su tiempo pero mereció la pena, ¿que tal lo véis? Sin dudarlo, tendrá hermanos y hermanas.

Os veo como siempre en los comentarios! Ya sabéis que me encanta que charlemos un rato y así me contáis qué opináis vosotras :)

Gracias por estar ahí!
Un besazo de parte de la familia canguro,

♡♡♡

Besos, M.